El uso de agroquímicos ha permitido sostener la producción y responder a la demanda mundial, pero también ha dejado huellas profundas en el suelo, el agua y en quienes trabajan la tierra.
El uso de agroquímicos ha permitido sostener la producción y responder a la demanda mundial, pero también ha dejado huellas profundas en el suelo, el agua y en quienes trabajan la tierra.