La última edición del Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar no solo dejó récords de audiencia y espectáculos memorables, sino también marcó un avance en materia de gestión de residuos. Durante los siete días del certamen, se lograron recuperar 2.808 kilos de materiales reciclables, gracias a un sistema de recolección implementado en distintos puntos claves del evento.
Según los registros, los residuos fueron clasificados en distintas categorías, con el plástico liderando la recuperación con 1.035 kilos, seguido de metales (521 kg), vidrios (461 kg) y cartón (398 kg). Además, se recuperaron 243 kilos de otros materiales reciclables y 4 kilos multimaterial.
El operativo, desarrollado por ReSimple, incluyó la instalación de puntos de reciclaje en sectores estratégicos de la Quinta Vergara y zonas aledañas, con el fin de facilitar la correcta separación de residuos, así como también, el trabajo con recicladores de base, quienes cumplieron un rol fundamental en lo que fue la cadena de coordinación y articulación para la correcta gestión de residuos en terreno. En términos de volumen, los puntos ubicados en el sector de foodtrucks fueron los que concentraron la mayor cantidad de materiales reciclados, con 2.013 kilos recolectados.
“Recuperar casi 3 toneladas de residuos en un evento de esta magnitud es una señal de que la gestión de residuos puede integrarse de manera efectiva en encuentros masivos. Lo relevante aquí no es solo la cantidad de material recuperado, sino el proceso detrás: separación, trazabilidad y valorización. Esto demuestra que, si existe una infraestructura adecuada y educación ambiental, es posible reducir significativamente el impacto de estos eventos», destaca Javier Fuentes, gerente general de ReSimple.
Así, la jornada con mayor volumen de reciclaje fue el viernes 28 de febrero, con 596 kilos recolectados, seguida del sábado 1 de marzo, con 565 kilos. El balance general del certamen evidencia que el desafío ahora es dar continuidad a este tipo de iniciativas en el resto de los eventos masivos del país.
Al respecto, Macarena Ripamonti, alcaldesa de Viña del Mar, valoró el trabajo colaborativo detrás del operativo de reciclaje, destacando que, «la colaboración virtuosa entre Mega, Bizarro, Resimple y el Municipio ha demostrado que es posible integrar el reciclaje de manera efectiva en eventos masivos. Pero, más allá de eso, lo realmente importante es entender que este esfuerzo debe trascender los festivales. Se trata de un trabajo conjunto y una responsabilidad compartida para construir una cultura de reciclaje que sea permanente, no puntual. Esta visión la hemos venido impulsando a través de un plan de gestión de residuos en distintos sectores de la comuna, y queremos seguir avanzando con la convicción de que cada paso cuenta hacia una Viña del Mar más sostenible y comprometida con su entorno».
Finalmente, «el gran reto es que el reciclaje no dependa solo de iniciativas aisladas. Debemos fortalecer una cultura que trascienda festivales o campañas específicas, y que se convierta en una práctica habitual. La clave está en la corresponsabilidad: ciudadanos, empresas y sistemas de gestión de residuos trabajando juntos para generar un cambio estructural«, concluye Fuentes.
¿Cómo fue el ciclo del reciclaje en Viña 2025?
La recolección de residuos en el festival no solo implicó la instalación de puntos de reciclaje, sino también un proceso logístico que garantizó la correcta disposición y valorización de los materiales recuperados.
- Puntos verdes: En distintos sectores del evento se instalaron estaciones de reciclaje para botellas plásticas, latas de aluminio y otros envases.
- Monitores ambientales: Un equipo de más de 20 promotores orientó a los asistentes sobre la correcta separación de residuos, incentivando la participación activa del público.
- Gestión de residuos: A través del trabajo conjunto con recicladores locales, en este caso la Cooperativa de Recicladores de Base de Viña del Mar, los materiales fueron trasladados a un punto de acopio, donde se realizó su pretratamiento y clasificación.
- Caracterización: Cada mañana, posterior a la realización del festival, se realizaron caracterizaciones de los distintos residuos, proceso llevado a cabo por una empresa externa, que permite identificar y clasificar los residuos recolectados
- Trazabilidad y valorización: Cada residuo recuperado fue gestionado bajo un proceso que permitió su reinserción en la economía circular, evitando que terminara en rellenos sanitarios o vertederos.
- Stand de marca: Un entretenido stand junto a promotores, un juego interactivo (que enseñaba a las personas qué materiales reciclar), como también la participación de Scar Lata y otros corpóreos del Reci Clan, estuvieron presentes cada noche del festival, alentando a los asistentes a sumarse a los desafíos del reciclaje y la correcta segregación en el recinto mismo.
