La eficiencia energética como parte del proyecto formativo de la educación técnico-profesional

En Duoc UC Sede Valparaíso generamos diversas acciones para que nuestro proyecto educativo cumpla coherentemente y sea consecuente con el uso racional y eficiente de los recursos naturales.

Hoy, en el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, no podemos dejar de mencionar que el cuidado del entorno y la riqueza de la biodiversidad, se deben realizar de manera consiente, aplicando diversos conceptos de uso racional y eficiencia del uso de los recursos disponibles.

Cristián Fuentes, académico DUOC UC Valparaíso

En el proceso formativo, esto debe estar siempre presente. Por lo que en el modelo de aprendizaje la eficiencia es un componente importantísimo para generar cambios de conducta y así, disminuir el impacto del entorno desde los distintos procesos de producción.

En este sentido es que en Duoc UC Sede Valparaíso generamos diversas acciones para que nuestro proyecto educativo cumpla coherentemente y sea consecuente con el uso racional y eficiente de los recursos naturales.

En nuestra caso, en las carreras de la Escuela de Ingeniería, Medio Ambiente y Recursos Naturales, contamos con un Centro Tecnológico Agrícola en la comuna de Quillota, en donde tenemos dispositivos de eficiencia energética basados en el uso de energía fotovoltaica.

Para el funcionamiento de las instalaciones académicas de este inmueble, utilizamos 74 paneles solares de 260 W (capacidad instalada 19,24 kW), los cuales abastecen el requerimiento energético. La planta genera mensualmente entre 800 kWh y 1700 kWh, lo cual se distribuye entre los consumos e inyecciones a la red, logrando satisfacer la demanda de consumo promedio de un 50% del total requerido en salas de clases, laboratorios, oficinas y cafetería.

En tanto y según los reportes mensuales, Duoc UC consumió el 49% de la energía generada el pasado mes de abril, todo excedente fue inyectado a la red eléctrica.

La planta fotovoltaica corresponde a un sistema on-grid compuesto por paneles solares conectados a dos inversores, los cuales convierten la energía generada a energía AC y la distribuyen a través del tablero general FV hacia los consumos del recinto, introduciendo los excedentes hacia la red eléctrica en caso de que haya. La planta además cuenta con un sistema de monitoreo que permite supervisar la generación y los consumos del establecimiento constantemente.

Además, tenemos con un sistema fotovoltaico con seis paneles solares de 460 Wp, que conectados en serie suman 2.760 Wp, los cuales generan energía eléctrica en forma de corriente continua para la extracción de agua de un pozo para el uso de riego de cultivos experimentales.

Esta energía es entregada a un controlador que la convierte en corriente alterna trifásica de frecuencia variable. Un motor eléctrico sumergible de 1.5 HP, instalado a 36 metros de profundidad, usa esta energía para girar su rotor a una velocidad proporcional a la frecuencia suministrada.

Una bomba sumergible, acoplada al rotor del motor, gira a esta misma velocidad e impulsa el agua subterránea hacia la superficie. El controlador hace girar la bomba más rápido cuando la radiación solar sea alta y a menor velocidad cuando es baja. Además, suaviza los encendidos y apagados del motor para alargar su vida útil.

Dado que es más fácil almacenar agua que energía, se usan estanques con un total de 30 mil litros de capacidad, en vez de baterías para poder contar con agua cuando la radiación solar no sea la suficiente para producir energía proveniente del sol. De esta manera, abastecemos la demanda hídrica de frutales, hortalizas al aire libre, viñedos e invernaderos durante todo el año, en casi dos hectáreas altamente productivas, dispuestas como ambiente de aprendizaje para los estudiantes de las carreras impartidas en el Centro Tecnológico Agrícola de Quillota.

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