Por Nicolás Bastián, director de Ingeniería en Acústica Austral.
El ruido de parques eólicos es un problema que día a día se acrecienta en nuestro país. Hasta ahora, existen 39 parques eólicos instalados en Chile y se espera que se construyan más de 100 parques adicionales a los existentes (información obtenida del Servicio de Evaluación Ambiental), siendo este incremento coherente con la política energética de Chile 2050, publicada en diciembre de 2015. Dicha política propone una visión del sector confiable, sostenible, inclusivo y competitivo, con el fin de avanzar hacia una energía sustentable en todas sus dimensiones.
Si bien el utilizar energías renovables es fundamental para lograr ser un país sustentable, es importante aprender a convivir como ciudadanos con lo mismo, teniendo en consideración que todo avance puede generar un perjuicio en algún lugar o persona.
En este sentido, los parques eólicos se caracterizan por ser una fuente de energía limpia, que, sin duda, tiene un gran impacto visual y genera un ruido muy particular y molesto para personas que habitan cercanos a ellos.
En Chile, en el año 2017 y 2018 el Ministerio del Medio Ambiente, elaboró un estudio, denominado “Caracterización acústica de parques eólicos”, el cual buscó caracterizar espacial y temporalmente los niveles de ruido generados por los diferentes parques eólicos instalados en el país. Este estudio se encuentra disponible en el Sistema Nacional de Información Ambiental. El estudio fue desarrollado por nuestra compañía, siendo el primer estudio técnico en Sudamérica sobre ruido de parques eólicos, por lo cual, brindó mucha información y aprendizaje.
Respecto del estudio, advertimos que la normativa de ruido vigente en el país para este tipo de fuente (Decreto Supremo N°38, de 2011, del Ministerio del Medio Ambiente “Norma de Emisión de Ruidos Generados por Fuentes que Indica” [1]), no es la más apropiada, siendo necesario contar, de forma urgente, con algún cuerpo normativo que defina criterios de medición y predicción de ruido y defina límites que permitan minimizar los impactos por ruido en su entorno.
Dada la complejidad de este tipo de proyectos, resulta necesario ejecutar un monitoreo continuo de ruido para caracterizar, apropiadamente, las emisiones de ruido y la condición basal de ruido del proyecto, toda vez que sus niveles de emisión de ruido dependen, principalmente, de las condiciones de viento, tanto velocidad como dirección. Además, es necesario utilizar instrumental especializado para evaluar, adecuadamente, el ruido de parques eólicos, en específico, la utilización de una pantalla antiviento diseñada especialmente para medir su ruido, permitiendo eliminar el efecto que produce el viento sobre el diafragma del micrófono del equipo que mide ruido (similar a cuando uno habla por celular y se escucha el ruido del viento chocando con el micrófono). Por otra parte, es imperante realizar la evaluación de ruido bajo las condiciones de operación del parque, es decir, a una velocidad de viento entre 6-12 m/s en altura de buje.
Existen varias recomendaciones, algunas muy técnicas, que escapan del objetivo de esta columna, pero sin duda, es un problema complejo que debe ser abordado por especialistas con expertiz y cuenten con el instrumental apropiado para desarrollar un proyecto íntegro.
Como se mencionó anteriormente, es necesario contar con algún cuerpo normativo específico de ruido de parques eólicos en Chile, el cual permita seguir desarrollando proyectos energéticos en el país, pero minimizando los impactos por ruidos en las comunidades cercanas a los proyectos.
Aprovecho la instancia para comentar que acabamos de actualizar la página web de nuestra compañía.
Referencias bibliográficas:
[1] Decreto Supremo N°38 del Ministerio del Medio Ambiente. Norma de emisión de ruidos generadores por fuentes que indica. Ministerio del Medio Ambiente, Gobierno de Chile (2011). Disponible en Internet: