La iniciativa titulada Plataforma Industria Circular de la Región de Valparaíso, proyecto FIC financiado por el Gobierno Regional y desarrollado por la Universidad de Valparaíso, buscará contribuir en el mejoramiento de la competitividad territorial del sistema productivo, y además, a desarrollar la sustentabilidad social mediante la creación de valor industrial compartido.
El investigador y desarrollador del proyecto, Álvaro Bello, trabajó en la identificación de los indicadores sociales vinculados a la gestión de residuos, en la que se consideraron dos elementos fundamentales: el tipo de residuo-producto y la categoría de stakeholders o parte receptora del impacto potencial de cada residuo-producto.
“Estamos hablando de indicadores de impactos sociales potenciales relacionados a las externalidades positivas o negativas, de acuerdo a las subcategorías de impacto social derivadas de la parte interesada (trabajadores) vinculados al proceso de gestión de los distintos residuos gestionados por la plataforma. Es decir, se definieron los indicadores de impacto social potencial considerando las convenciones y directrices nacionales e internacionales relacionadas a los trabajadores”, detalló el trabajador social Álvaro Bello.
La Plataforma Industria Circular es desarrollado por la Facultad de Ingeniería de la UV y dirigido por la académica Patricia Martínez. Éste busca mejorar la competitividad regional, en particular de su sistema productivo, además de contribuir al desarrollo de la sustentabilidad social mediante la creación de valor compartido, es decir, generar valor económico que aporte a la sociedad, tomando en cuenta sus necesidades y desafíos.
En este aspecto, Álvaro Bello, sostiene que una iniciativa de características sustentables, particularmente en lo social, debe articularse bajo un modelo sinérgico de gobernanza, que regule la dinámica relacional entre los distintos actores del territorio involucrados directa e indirectamente. “Parte importante del éxito de aquello es propender a la generación de capital social, es decir, desarrollar confianza, cooperación y reciprocidad entre los grupos de interés”, explica.
También Álvaro Bello apunta a lo relevante de incluir el parámetro social en el proyecto, ya que desde la perspectiva del desarrollo, el pilar de la sustentabilidad social siempre ha sido relegado por diversas razones, como la predominancia de llevar su discusión y análisis a las áreas del conocimiento ambiental y económica. “Junto al equipo interdisciplinario de profesionales, se ha desarrollado una propuesta de indicadores de impacto social como una manera de avanzar en su estandarización y monitoreo, los que son integrados en la Plataforma Industria Circular como una forma de relevarlos y aportar efectivamente a una industria de gestión de residuos más sustentable y circular”, precisa.
El camino hacia la economía circular considera que la producción y el consumo sean sustentables en el centro de sus actividades, para mejorar el desempeño social y ambiental de la mano de una rentabilidad económica sostenida que redundará en un mayor bienestar de las personas. En este sentido, la experiencia de Plataforma Industria Circular promueve el posicionamiento de la dimensión social de la sustentabilidad en los sistemas de gestión industrial, pero también en el consumo en la región y en el resto del país.