La sustracción ilegal de recursos marinos que afecta al banco de machas que abarca desde el sector de Peñuelas hasta Los Choros, en la Región de Coquimbo, afecta a los mariscadores autorizados, que acusan millonarias pérdidas, y amenaza la explotación sostenible de estos moluscos. Por esta razón, desde el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura anunciaron la pronta ejecución de un plan de seguridad que incorporará tecnologías a las fiscalizaciones para frenar el creciente fenómeno, incluyendo también una mayor coordinación con policías y autoridades de gobierno.
Esta problemática se arrastra desde hace años, pero la situación actualmente es compleja al existir una baja considerable en la disponibilidad del recurso. Se calcula que en forma ilegal se extraen 4 toneladas de macha en diferentes puntos de la costa.
Esta cantidad señalada equivaldría a una pérdida de $4 millones diarios, según aseguraron los propios pescadores y macheros afectados, que ven mermados sus ingresos en las caletas de Peñuelas, Coquimbo, San Pedro y el sector de Los Choros, al norte de La Serena.
Respecto a las acciones que se proyecta implementar en la zona afectada, el director nacional de Sernapesca, José Burgos, detalló que “vamos a disponer de drones para mejorar las fiscalizaciones y hay que incorporar una serie de tecnologías como visores nocturnos para poder tener una mejor cobertura. Esto lo estamos trabajando con la autoridad marítima y el Ministerio de Defensa”.
Además, Burgos también se refirió a la necesidad de contar con una normativa legal que permita asegurar el castigo judicial en contra de quienes realicen la sustracción ilegal de recursos marinos, que en definitiva, es un delito. “Este fenómeno es derechamente un robo. Estamos formulando un proyecto de ley en el que se introduce una figura de asociación ilícita, que nos permitirá poder perseguir judicialmente a los infractores a través de la Fiscalía y con una investigación efectiva”.
Fuente: www.diarioeldia.cl
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