Según la evidencia científica, la acumulación de gases de efecto invernadero en la atmosfera, como el dióxido de carbono, son un causante directo del calentamiento global. Por tanto, una de las medidas necesarias para mitigar el cambio climático es alcanzar la carbono neutralidad, es decir, conseguir emisiones de dióxido de carbono netas iguales a cero, a través del equilibrio de la cantidad de dióxido de carbono liberado en la atmósfera con una cantidad equivalente retirada mediante sumideros de carbono.
Para alcanzar dicha meta y otras de orden ambiental, Chile hoy se encuentra tramitando en la Cámara de Diputados, tras su aprobación en el Senado, el proyecto de Ley Marco de Cambio Climático. Esta ley es fundamental para enfrentar la crisis climática, puesto que ayudaría a ordenar las acciones y programas dispersos, otorgando directrices generales. Bajo este contexto, el pasado martes 18 de enero, la Cámara discutió la fecha en la que Chile debía alcanzar la carbono neutralidad.
Sin embargo, días antes a la discusión, ya se habían viralizado las diferentes posturas en torno a esta fecha, mientras que algunos y, en base al Acuerdo de París, pensaban respetar el 2050 como plazo límite, otros proponían metas más ambiciosas y adelantar la carbono neutralidad de Chile al 2040. En Twitter, la politóloga, Pamela Poo, señalaba que, “necesitamos ambición y esa empieza por ley, ya que hacemos que el mundo económico y político también la tengan y en nuestro caso no es solo en mitigación, sino también adaptación…La ciencia (Rockstromm) señala q tenemos hasta el 2030 para reaccionar, al 2040 ya es tarde”.
En su hilo de Twitter agregó que, “si bien hay científicos que estipulan que el 2050 es un escenario comprobado, la verdad es que son modelos, de los cuales no hemos visto resultados, por lo que, si se equivocan y de nuevo llegamos tarde habremos perdido todos”.
Respecto a estas declaraciones, Maisa Rojas, directora del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR2) y futura ministra del Medio Ambiente en el próximo gobierno, respondió que, “escenarios evaluados en el IPCC (Panel Intergubernamental del Cambio Climático) dicen 2050 para limitar calentamiento a 1.5C. estudios para Chile muestran factibilidad (pero difícil). En el senado se acordó “a más tardar el 2050”, dando posibilidad de adelantar meta porque se revisa cada 5 años (loop de ambición de Acuerdo de Paris)”.
Exposición en el Congreso
El martes 18 de enero expusieron oficialmente sus posturas, Maisa Rojas y Marcelo Mena, exministro del Medio Ambiente del segundo gobierno de Michelle Bachelet. Mientras Rojas concordó con la visión del Gobierno de Piñera (aprobada en el Senado), Mena se mostró partidario de adelantar el límite al año 2040.
Marcelo Mena calificó como poco ambiciosa la decisión de establecer el 2050 como fecha límite para alcanzar la neutralidad de las emisiones por parte de Chile. Esa postura, afirmó el exministro del Medio Ambiente, le quita al país la oportunidad de avanzar hacia el desarrollo económico y sostenible. En esta línea, el especialista agregó que, “alcanzar la neutralidad de emisiones de gases de efecto invernadero en 2040 es apostar por Chile y su desarrollo, ya que no solo perseguiría metas ambientales, sino que además permitiría abordar problemáticas a nivel país de gran relevancia como la reducción en los costos del transporte y energía eléctrica, y disminuiría la pobreza energética presente en muchos hogares en Chile”.
Según los datos entregados por Mena en la Comisión, los costos de nuevas plantas de ERNC son hasta un 50% menores a los necesarios para continuar operando las actuales plantas de carbón y en un futuro cercano a las plantas de gas natural. “Esto muestra que adelantar la meta al 2040 es beneficioso para nuestro país, independiente de las posturas que tomen los demás países”, agregó.
“El cambio climático para Chile es una amenaza real, que puede provocar que Chile pierda hasta un 25% de su crecimiento económico, pero, al mismo tiempo es una oportunidad para transformar productivamente el país y transitar hacia la independencia energética. Por eso, espero que los partidos del próximo gobierno apoyen la ambición climática y voten a favor de la carboneutralidad de Chile al 2040”, concluyó el especialista.
Por su parte, Maisa Rojas recordó que el Acuerdo de París “tiene dos objetivos de temperatura, limitar el calentamiento muy por debajo de los 2 grados, y hacer los esfuerzos posibles para limitarlo a 1,5”.
Y añadió que, “sobre la posibilidad de lograr ese 1,5°, el informe del IPCC emitido en octubre de 2018 (y se ratifica en otro publicado en agosto del año pasado) indica que es posible lograr el calentamiento a 1,5° pero hay un nivel de urgencia muy grande y, para eso, el planeta completo tiene que ser carbono neutral en 2050. Es ahí cuando aparece el 2050 como fecha límite para lograr la carbono neutralidad, y se confirmó después en la COP26”. Así, para la climatóloga, la fecha de 2050 se ajusta plenamente a los requerimientos del Acuerdo de París, quedando la legislación nacional alineada con lo que se necesita a nivel global.
“Para la COP26 lo más importante es implementar el Acuerdo de París y, en el caso de Chile, eso se logra teniendo esta ley. Si ustedes me preguntan cuál es la acción más importante que debiéramos realizar, es contar con esta ley, porque solo con ella, por ejemplo, los ministerios van a tener que reportarle anualmente al Ministerio del Medio Ambiente qué es lo que están efectivamente haciendo para alcanzar la carbono neutralidad, obligación que no tienen en este momento”, puntualizó la experta.
Finalmente, la fecha para alcanzar la carbono neutralidad está contenida en las indicaciones del Artículo 4 del proyecto de ley de Cambio Climático y se fijó en el año 2050, siendo ratificada tanto por el Senado, y posteriormente, por la Comisión del Medio Ambiente de la Cámara de Diputadas y Diputados este martes recién pasado. Sin embargo, la propuesta se volverá a discutir en marzo con la nueva ministra ya asumida.
