Durante la primera semana de diciembre, se realizó el Primer Comité Estratégico de la iniciativa “Transitando hacia una construcción circular y descarbonizada en Chile”, instancia convocada por la ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, y liderada por el subsecretario del Medio Ambiente, Maximiliano Proaño, en dependencias del Ministerio del Medio Ambiente.
La jornada reunió para la firma a representantes designados de los ministerios de Medio Ambiente, Obras Públicas, Vivienda y Urbanismo, Desarrollo Social y Familia, así como del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y Fundación Chile, conformando oficialmente el espacio que orientará las directrices estratégicas del proyecto.
El comité, integrado por equipos técnicos de las entidades, tiene como objetivo ofrecer visión de mandato público, priorizando los cambios legislativos, regulatorios y normativos necesarios para avanzar hacia un modelo de construcción circular, resiliente y regenerativa, y colaborar con la implementación de los resultados del proyecto en los servicios públicos tanto en el nivel central como el regional de la administración.
Según destacó el Subsecretario, esta instancia permitirá alinear criterios, fortalecer la colaboración entre carteras públicas y acelerar la transición del sector construcción hacia un modelo bajo en impactos ambientales, resiliente y adaptable a los impactos del cambio climático.
Desde su fase de diseño, el programa ha incorporado activamente a los distintos ministerios, a través de reuniones técnicas que permitieron levantar desafíos, brechas y necesidades propias del sector. Esta co-construcción es clave, considerando que una de las líneas de trabajo más relevantes del proyecto es justamente la elaboración e impulso a propuestas legislativas, reglamentarias y la creación de nuevos instrumentos habilitantes que permitan materializar la economía circular en el sector construcción.
El desafío que aborda el proyecto es urgente. A nivel global, “el 35% de los residuos proviene de actividades de construcción y demolición”, señaló Ignacio Simon, contraparte del proyecto en PNUMA. “En Chile, solo las edificaciones autorizadas generan más de siete millones de toneladas de residuos al año, y se estima un total superior a 20 millones de toneladas anuales, superando ampliamente los residuos municipales. Muchos de estos terminan en vertederos ilegales, afectando la salud, degradando ecosistemas y profundizando desigualdades territoriales”, señaló el Subsecretario.
Ante este escenario, avanzar hacia una construcción circular no solo es una medida ambiental, sino también económica y social. Incorporar criterios de circularidad desde el diseño, prolongar la vida útil de los materiales y cambiar el modelo productivo a uno que pueda regenerar los sistemas naturales, se traduce en procesos más eficientes, menos contaminantes y económicamente rentables, además de generar empleo justo y resiliente. Tomas Saieg, jefe de la oficina de Economía Circular de MMA señala que “este enfoque se alinea con la Hoja de Ruta de Economía Circular en Construcción al 2035, los planes sectoriales de cambio climático y las metas establecidas en la NDC 2025”.
La iniciativa “Transitando hacia una construcción circular y descarbonizada en Chile”, liderada por el Ministerio del Medio Ambiente, financiado por el GEF, coordinado por PNUMA y ejecutado por Fundación Chile, trabajará hasta 2029 en promover cambios estructurales que habiliten una transición efectiva del sector. Para ello se apuesta por una amplia alianza público-privada y por intervenciones habilitantes y de impacto, que consoliden mercados circulares y prácticas de construcción sostenibles, sobre todo desde las compras públicas.
En la jornada Rubén González, arquitecto líder ministerial en MMA de la iniciativa, y Cecilia Vidal, Directora del proyecto en FCh, destacaron los avances a la fecha, definieron los desafíos para el Comité Estratégico conformado y los siguientes pasos a seguir, resaltando la función y carácter de este Comité en el marco de la gobernanza ampliada público-privada del programa. Durante sus primeros seis meses, el programa ha desarrollado avances claves, llegando a más de 600 personas, provenientes de más de 270 instituciones públicas y privadas, que han participado en las actividades ya realizadas. Asimismo, se ha consolidado una red de colaboración con más de 30 instituciones y se han firmado ocho convenios de trabajo para impulsar las principales actividades que dan inicio a la ejecución del proyecto, y otros se encuentran en proceso de cierre.
En el plano técnico, destacaron el inicio del piloto junto a CTEC para diseñar un dispositivo de testeo ambiental para el uso seguro de residuos y subproductos industriales en infraestructura vial; el desarrollo de metodologías para estimar el precio social de los impactos ambientales, asociados a la construcción y demolición y determinar el precio social de la generación y manejo de RCD, proyecto que será desarrollado por InnovaCiclos. la elaboración de estándares de circularidad para la industria forestal, maderera y de la construcción en madera, que desarrolla CIM-CENAMAD; el desarrollo de un dispositivo para la teledetección de vertederos ilegales y extracción ilegal de áridos, a cargo de CIPYCS; el desarrollo de nueve perfiles de competencias laborales junto a ChileValora; y un estudio para identificar impactos de la sobre especificación en el uso de materiales, contratado a la consultora APORTO.
Con este primer Comité, se da un paso decisivo para articular el trabajo interministerial y avanzar hacia una construcción más limpia, eficiente y alineada con los desafíos climáticos del país, señaló el Subsecretario Proaño. La jornada además permitió a los distintos servicios públicos declarar intereses específicos para avanzar con la implementación de la economía circular en el marco de las desafiantes metas de política pública ya comprometidas.
