La fiscalización de Segunda Generación se está haciendo una realidad en distintas regiones del país, con el uso de drones, imágenes satelitales y sensores. La ciudad de Concepción, fue elegida para la implementación de este nuevo modelo de fiscalización, realizándose la instalación de un sensor de medición remota, que entre otras materias, puede captar ruidos para ser monitoreados en línea.
Profesionales de la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) instalaron en el hogar de un denunciante de ruidos molestos por la construcción de un edificio, un sensor de monitoreo de ruido de la serie de dispositivos Smart Cities. Este equipo, capaz de captar y medir el nivel de presión sonora generado por una o múltiples fuentes emisoras de ruido durante las 24 horas del día, a su vez, transmite los datos que va registrando hacia una nube virtual, permitiendo a la SMA monitorear el comportamiento de Unidades Fiscalizables denunciadas. La tecnología empleada por estos dispositivos, permite incluso que la información pueda ser revisada por los profesionales de la Superintendencia, a través de un sitio web o en la aplicación para celular, todo esto de manera remota, para poder revisar los datos obtenidos por el dispositivo.
Esta es una tecnología experimental, que ayuda como una medición referencial sobre lo que ocurre en las cercanías de una fuente emisora. De esta manera, permite a la SMA planificar las fiscalizaciones a las horas que representan la condición de mayor exposición al ruido por parte de los afectados, aplicándose en dicha instancia la metodología oficial del D.S. 38 de 2011 del MMA, correspondiente a la Norma de Emisión de Ruidos, que involucra el uso de un sonómetro calibrado por operado por un profesional con competencias para la medición.
Emelina Zamorano, jefa de Oficina de la Región del Biobío señaló que esta tecnología permitirá mantener un monitoreo continuo de las condiciones de ruido que se pueden generar, por ejemplo, en una faena de construcción que afecte a comunidades aledañas, una de las denuncias más frecuentes en la ciudad de Concepción, junto al funcionamiento nocturno de pubs y discoteques. En lo que va del año, dicha repartición ha recibido 88 denuncias, de las cuales 57 (65%) se refieren a molestias de vecinos respecto de ruidos molestos.
“Los ruidos son un contaminante invisible, pero que provoca gran alteración en la calidad de vida de quienes se ven expuestos a él durante el día, y muy especialmente en la noche. Con la ayuda de los sensores podemos planificar mejor las inspecciones, ya que la norma de ruido nos obliga a realizar mediciones dentro y fuera de los hogares afectados, por lo que tenemos que ponernos de acuerdo telefónicamente antes con los vecinos, y con un monitoreo de un par de días por 24 horas, podemos tener una sintonía fina respecto de las horas con más ruido para ir a medir, y así los vecinos también se planifican para recibir al fiscalizador”, señaló Zamorano.
Por el momento, si bien este proyecto piloto comenzó con la instalación de un sensor, se está trabajando para que en las próximas semanas se instalen otros dispositivos de similares características para el monitoreo de otros tipos de contaminantes. Cabe destacar que la tecnología que permite implementar estos sensores y conectarlos en línea a la SMA, fue desarrollada especialmente por los equipos profesionales de la Superintendencia –para medir entre otros, ruidos, emisiones atmosféricas, emisiones a cuerpos de agua-, y hoy se cuenta con un sistema que permite integrar múltiples sensores online para monitorear el cumplimiento de la normativa ambiental.
Exitoso Plan de Cumplimiento de Pub en Concepción
Uno de los sectores con más denuncias por ruidos molestos en la Región del Biobío –y también a nivel nacional- es el del entretenimiento nocturno. En Concepción, es importante destacar que se está trabajando en la fiscalización y sanción de ruidos provenientes de pubs y discoteques.
En el caso del Pub “Maldita Sea”, ubicado en calle Rengo 1624, Concepción, la SMA recibió denuncias por ruidos provenientes de este recinto durante 2014 y 2015, realizando fiscalizaciones que constataron más de 50 decibeles en hogares cercanos, por lo que se incumplía la Norma de Ruido para horario nocturno. En marzo de 2016 se inició un proceso de sanción contra la compañía, presentando ésta un Programa de Cumplimiento que incluía mejorar el aislamiento acústico del local, a través de sellos de espuma de poliuretano, instalación de doble puerta, cierre automático de puertas, ventanas de termopanel, entre otras medidas. En agosto de 2016 el local terminó las obras y acompañó un informe de medición de ruidos realizado por una empresa especializada para certificar que las medidas tomadas fueran efectivas. Durante los meses siguientes, la SMA no ha recibido nuevas denuncias de vecinos afectados por los ruidos de este local, por lo que esta semana se finalizó el proceso declarando exitoso el Programa de Cumplimiento presentado, que involucró inversiones por cinco millones de pesos, aproximadamente.
“Con medidas que son relativamente simples y fáciles de implementar se puede cumplir con la norma de ruidos y convivir con los vecinos en zonas mixtas. Es importante destacar el cumplimiento de este PDC, pues no se han producido nuevas denuncias. En la región tenemos otros casos de empresas de éste y otros rubros con denuncias por ruido. Llamamos a todos los titulares de proyecto a cumplir cabalmente con la norma de ruido vigente. Como SMA profundizaremos este esfuerzo de fiscalización incorporando el uso de tecnologías de última generación como los sensores remotos”, finalizó la Jefa Regional de la Oficina del Biobío.