Frente a la aprobación del proyecto Dominga en la Comisión de Evaluación Ambiental de la Región de Coquimbo, la Alianza Humboldt, conformada por diversas organizaciones socioambientales de Chile, aseguraron que el gobierno de del Presidente Sebastián Piñera entregó una señal evidente sobre su falta de compromiso con la protección del Archipiélago de Humboldt y el medio ambiente. «Aprobaron el proyecto minero de Andes Iron, tan solo días después de que se conocieran los informes del IPCC (Panel Intergubernamental del Cambio Climático) alertando sobre la crisis climática actual», indicaron.
Desde la organización señalaron que la aprobación de este proyecto se llevó a cabo pese a la existencia de recursos judiciales pendientes, remarcando que esta iniciativa ya había sido rechazada en dos ocasiones, debido a su incompatibilidad con el ecosistema del Archipiélago de Humboldt y sus graves falencias técnicas.
“Mientras sabemos que vamos por un camino de no retorno por la crisis climática y ecológica, se aprueba un proyecto muy dañino. Mal por Chile, pero seguimos esperando que resuelva la Corte Suprema en derecho y anule esta votación, junto con el fallo del Tribunal Ambiental”, señaló Ezio Costa, director ejecutivo de FIMA y abogado de la Alianza Humboldt, quien además criticó el mal uso que se le entrega a la Comisión de Evaluación Ambiental “para favorecer intereses privados y en contra del interés público”.
Cabe recordar que, en mayo de 2020, las organizaciones ambientales en conjunto con los pescadores y las comunidades de la Higuera, presentaron diversos recursos de casación ante la Corte Suprema para no validar la sentencia del Primer Tribunal Ambiental de Antofagasta (1TA), cuya orden terminó en la votación del 11 de agosto, sin embargo, el tribunal no se ha pronunciado al respecto.
A ello, según la Alianza Humboldt, la aprobación actual del proyecto no se traduce en ningún caso en que la minera pueda ejecutar su construcción, pues se realizará un reclamo frente al Comité de Ministros, quienes se verían en la necesidad de esperar a que se resuelvan las causas judiciales para poder recién pronunciarse.
Cabe destacar que la minera contempla solo 25 años de vida útil, y el proyecto Dominga supone la construcción de un mega puerto en el Archipiélago de Humboldt y dos minas a rajo abierto, todo esto en un terreno que posee uno de los ecosistemas más valiosos de todo el planeta, de acuerdo con científicos nacionales e internacionales.
Pésimo este gobierno, no firmaron Escazú justamente porque fortalece el conocimiento público de los proyectos y la participación ciudadana. Lo aprueban por secretaría a pesar del rechazo de instancias institucionales. Privilegian los intereses mezquinos de empresarios ligados al presidente en desmedro del resto de la población. Espero que la corte suprema revierta esta aberración y abuso y que los constituyentes se pongan las pilas para evitar en futuro que autoridades sin escrúpulos se aprovechen de sus cargos para privilegiar intereses de grupos económicos con cero aporte a la sustentabilidad medio ambiental.
Un vergüenza este gobierno
La editorial se refiere, sin conocer en detalle el proyecto, a «graves falencias técnicas» ¿cuáles? También habla de incompatibilidad (genéricamente) con la Reserva Marina. Como miembro del Comité ambiental de la Comunidad Agrícola Los Choros, donde se prevé uno de los rajos del proyecto (rajo norte), me tocó leerme completo el EIA. Y hablo de una decena de volúmenes de más de cien páginas cada uno, referidos a los distintos componentes ambientales a ser afectados. No encontré en ningún caso, «graves falencias técnicas»; nada «alarmante», como intentan los titulares del periodismo sesgado ideológicamente o irresponsable desde el punto de vista profesional, crear en la ciudadanía. Sigo a CODEX VERDE hace años. Así mismo fui de los primeros socios financistas de Greenpeace en Chile. Dejé de serlo cuando asumió Matías Asún la presidencia y mezcló su ideología personal con su trabajo como promotor de una ONG ambientalista, pero él desvía los fondos de todos para sanar su deuda personal con el combate feroz al neoliberalismo y a todo lo que suene a desarrollo industrial, sea bueno o malo y se él y los suyos los receptores y beneficiados finales de ese progreso. Mal que mal, la directora de Oceana y el presidente de Greenpeace son privilegiados ABC1 con sus vidas completamente resueltas y con un estándar de vida envidiable, que no depende de que se haga o no Dominga. Su sueldo es el mismo. Pero, para nueve mil personas de la segunda comuna más pobre de Chile, sí hace una diferencia en sus vidas. Hay que pensar un poco más holísticamente y no sólo desde la terraza del departamento en Las Condes tomándose un pisco sour, diciéndole a los demás (unos desconocidos que viven 500 km al norte), cómo tienen que vivir sus vidas y considerándolos unos niños INTERDICTOS para decidir su futuro…. Mal.
Sería bueno entrevistar a Andes Iron. Me parece que ya no habrá puerto. ¿Se cae entonces el reclamo furibundo? Y si el puerto se encuentra a 20 km de distancia de la reserva… ¿produce más impacto de 50 lanchones diarios que atacan a las manadas de delfines TODOS LOS DIAS durante los meses de diciembre a marzo?
Mmmmmm… da para pensar. Pero CODEX VERDE no está para bollos, dicen por ahí. Hay que andar pisando huevos por la vida y hay que «aparentar» estar del lado de los débiles, aun cuando los débiles sean los que producen el real impacto a la reserva marina.
Cordiales saludos,
Daniel Green
Ingeniero forestal
Consultor ambiental