El ministro de Medio Ambiente, el subsecretario de Salud y el intendente de Santiago se reunieron con la Comisión de Medio Ambiente para abordar el trabajo en torno a los planes de descontaminación, en particular de la ciudad de Santiago.
En noviembre del presente año se contará con una actualización del Plan de Descontaminación para la Región Metropolitana, para consulta ciudadana, para el que no se descarta la posibilidad de incorporar nuevas medidas que restrinjan en forma gradual el uso de vehículos catalíticos y estufas a leña en la capital.
En ese contexto, el ministro de Medio Ambiente, Pablo Badenier, expuso sobre las medidas de descontaminación que se están llevando a cabo en 14 ciudades del país, en el Plan Sectorial 2014-2018, y los cambios en las normas de medición de material particulado, en las que se incorporó el material fino (MP 2,5). El personero explicó que, actualmente, 10 millones de personas en el país están expuestas a una concentración promedio anual de MP2,5 superior a la norma.
El ministro Badenier señaló que las medidas adoptadas en las últimas décadas han permitido reducir los niveles de contaminación en Santiago, pero llamó la atención sobre la necesidad de reforzar la educación y apoyo ciudadano a nuevas medidas de control, considerando que en la actualidad el origen de las emisiones “son más ciudadanas”.
Explicó, al respecto, que en Santiago se calcula que el 5% de las viviendas cuenta con calefacción a leña y se presenta un parque automotriz de vehículos con sello verde de un millón 600 mil automóviles.
En esa misma línea, el intendente de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, señaló que se requiere un esfuerzo para volver a educar a la población, en el sentido que limpiar el aire de la capital requerirá adoptar medidas de restricción a la población e informar que hoy se han cambiado los estándares de medición, con normas más estrictas que en años anteriores. Pero planteó como una dificultad la capacidad de fiscalización en períodos de episodios críticos, debido a que se cuenta con muy poco personal para estas tareas en una ciudad que es muy extensa. Por ello propuso avanzar en un sistema único de denuncia ciudadana y adelantar el proceso de consulta de la actualización del plan de descontaminación para aprovechar el marco de una mayor sensibilidad de la población frente a este problema.
Finalmente, el subsecretario de Salud, Jaime Burrows, precisó que se mantienen constantes las consultas por enfermedades respiratorias y que se estima una reducción de consultas en el total anual. Añadió que esto se debe a las medidas adoptadas en materia de descontaminación pero también al aumento de cobertura de la vacunación contra la influenza.
Restricción a la leña
Sobre la exposición de las autoridades, el diputado Daniel Melo (PS), sostuvo que los gobiernos tienen que tomar decisiones claras para prevenir los episodios críticos en la calidad del aire y la salud, lo que estimó “impostergable”.
“Si tenemos la posibilidad de poder prohibir estas fuentes contaminantes (leña) y tenemos, además, localizado donde están estas fuentes, creo que es de todo sentido común que el Ejecutivo pueda avanzar en esa materia”, planteó.
El legislador recalcó que una ciudad como Santiago no puede “hacerle pagar los costos del medio ambiente y la calidad de vida al conjunto de la población”.
