La Organización de Naciones Unidas (ONU) alertó hoy sobre el devastador impacto de las guerras en el medio ambiente y la frecuencia con que los enfrentamientos son el resultado de la explotación de recursos naturales.
A propósito del Día Internacional para la Prevención de la Explotación del Medio Ambiente en la Guerra y los Conflictos Armados, la ONU reitera sus llamados a la paz y a evitar el deterioro de los ecosistemas durante las hostilidades.
La humanidad cuenta las afectaciones de las guerras en términos de soldados o civiles muertos y heridos, ciudades destruidas y bienes perdidos, sin embargo, rara vez se mencionan los daños al entorno, advierte a propósito de la jornada establecida en 2001 por la Asamblea General.
De acuerdo con la organización, «urge no olvidar que los conflictos también se traducen en la contaminación del agua, la quema de cultivos, la deforestación, el envenenamiento de los suelos y la muerte de animales».
Asimismo, recuerda que en las últimas seis décadas, el 40% de las crisis armadas internas han tenido como centro el control de recursos, ya sea madera, diamantes, oro o petróleo.
Por otra parte, ese tipo de conflictos tiene altas probabilidades de recurrir, señala.
Para la ONU, el Día Internacional constituye una oportunidad para abogar por que las acciones de defensa del medio ambiente formen parte de la prevención de enfrentamientos, el mantenimiento de la paz y las estrategias de reconstrucción.
«No puede existir una paz duradera si los recursos naturales que sostienen la vida y los ecosistemas son destruidos», afirma.
