Tras los informes del Instituto de Salud Pública respecto a la contaminación por metales pesados en la ciudad de Antofagasta, comenzó un proceso para llevar a cabo los exámenes que permitan dilucidar cuál es la cantidad de contaminantes que presentan las personas que viven, trabajan o estudian en las cercanías al Puerto de Antofagasta, punto con mayor índice de metales pesados.
Algunos de los resultados ya fueron conocidos, y se indicó que a lo menos 15 de los 107 niños que dieron muestras de sangre presentan plomo en su organismo, registrando valores superiores a 3 e inferiores a 10 microgramos de plomo por decilitro de sangre (mg/dl).
En estos casos, y según los estándares internacionales, se recomienda tomar medidas de seguimiento y exámenes más exhaustivos cuando se sobrepasan los 10 mg/dl de plomo en la sangre. A pesar que las muestras no indican que el valor supere los 10 microgramos, estos resultados se obtuvieron tras 73 muestras de todas las que se realizaron.
Siguiendo el protocolo, las autoridades de salud deben informar a los padres de esta situación.
Colegio Médico
El Colegio Médico, entidad que ha hecho presión todo el año respecto al tema de la contaminación portuaria, manifestó su parecer tras los resultados.
“Si ya tenemos más de 15 casos de menores, cuya cantidad de plomo se mueve entre 3 a 10 microgramos por decilitro de sangre; eso obliga a detener de inmediato la fuente sospechosa de contaminación. En este caso las actividades de embarque y desembarque con concentrados en el puerto local, porque se trata de menores, que pese a estar expuestos en una menor cantidad de tiempo, cuando van a los jardines, presentan niveles preocupantes y acumulativos en el tiempo”, fueron las palabras del doctor Andrei Tchernitchin, jefe del Departamento de Medio Ambiente del Colegio Médico.
El toxicólogo sugirió realizar pruebas a todos los niños, no sólo a los que estudian en las cercanías de los puntos con contaminación más alta, sino también a quienes residen en el sector, sugiriendo realizar exámenes de pelo. “No queremos pensar, entonces, qué puede estar ocurriendo en el caso de niños que viven todo el día cerca del puerto, tomando en consideración que los pequeños que acuden a ratos a un determinado jardín infantil ya están presentando valores que ameritan una intervención”.
El médico insistió que la exposición de las personas a metales pesados, sin que se controle la fuente emisora, genera graves consecuencias, ya que si hoy hay niños que presentan niveles de contaminación cercanos a la norma permitida, conforme pasa el tiempo este nivel puede aumentar y llegar a ser muy peligroso.
En tanto, el presidente del gremio de los médicos, Aliro Bolados, manifestó que “el Colegio Médico de Chile ha solicitado a las autoridades, que primero debe detenerse de una buena vez la fuente que origina esa contaminación, porque los daños son acumulativos en el tiempo y esos menores al ir pasando los días y los años corren mayor riesgo de sufrir gravísimas enfermedades neurológicas y cáncer asociados a esos metales pesados que reciben constantemente”.
Fuente: www.elnortero.cl
