El Consejo de Ministros para la Sustentabilidad, encabezado por el ministro del Medio Ambiente, Pablo Badenier, e integrado por otras diez carteras de Estado, aprobó el proyecto definitivo del Plan de Descontaminación Atmosférica de Valdivia por MP10 y MP2,5, el que ahora será remitido a Contraloría para su revisión y posterior promulgación oficial.
Este plan forma parte de una Estrategia de 14 Planes de Descontaminación impulsada por el gobierno para este período presidencial, y que ya cuenta con seis planes de descontaminación vigentes en Andacollo, Talca y Maule, Chillán y Chillán Viejo, Temuco, Osorno y Coihaique, a los que se suman siete más en desarrollo para las ciudades de Huasco, Los Ángeles, Región Metropolitana, Concón-Quintero-Ventanas, el Gran Concepción, Curicó y un nuevo plan de descontaminación por MP2,5 para Coyhaique.
“Con este plan de descontaminación esperamos disminuir en un 62% la concentración de material particulado en Valdivia, en un plazo de diez años, y sacarla de su condición de zona saturada”, dijo el ministro del Medio Ambiente, Pablo Badenier.
“Las medidas propuestas –agregó el ministro Badenier- implican un costo cercano a los 56 millones de dólares, de los cuales el 58% corresponde al Estado por subsidios de recambio de calefactores y aislación térmica, mientras que los beneficios de su implementación se estiman en 285 millones de dólares, principalmente por beneficios en la salud de sus habitantes y por ahorro de leña. Es decir, por cada dólar de inversión hay cinco dólares en beneficios para las personas”.
Participación ciudadana
La elaboración del Plan de Descontaminación de Valdivia se inició tras la declaratoria de la comuna como zona saturada por contaminación atmosférica en febrero de 2014, y su elaboración se inició en julio del mismo año.
Este trabajo incluyó un proceso de participación ciudadana que incluyó 22 talleres con más de 350 participantes, 12 presentaciones al comité operativo y seis presentaciones al comité operativo ampliado. Durante ese proceso se recibieron 24 observaciones con 120 consultas, principalmente de personas naturales, la academia y el Sistema Nacional de Certificación de Leña.
De acuerdo al inventario de emisiones del plan, la principal fuente de material particulado fino (MP2,5) de la ciudad es la quema de leña para calefacción residencial (94,1%), seguido de fuentes fijas (industria, 4.9%), fugitivas (0,5%), quemas o incendios forestales (0,3%) y móviles en ruta (0,2%).
Principales medidas
Para alcanzar esta meta establece una serie de medidas estructurales que ayuden a disminuir la contaminación, enfocadas principalmente en una calefacción sustentable de las viviendas, la regulación de la calidad de la leña, y el control de emisiones de calderas y transporte, entre otras.
En el ámbito de calefacción residencial, esto incluye la prohibición de uso de chimeneas de hogar abierto desde la entrada en vigencia del plan, la prohibición de calefactores de cámara simple al año 2022 y de los que no cumplan norma en 2025, así como la prohibición de calefactores unitarios a leña que no cumplan norma en establecimientos comerciales e instituciones de la administración pública, desde el año 2018.
Para apoyar esta tarea, el plan establece un programa de recambio voluntario de 26.000 calefactores a leña contaminantes por equipos más limpios y eficientes, de los cuales el 50% debe ser con un combustible distinto a la leña, en un plazo de 8 años. A esto se sumarán 18 mil subsidios de aislación térmica en 10 años, así como la definición de mejores estándares térmicos para viviendas nuevas y existentes.
En materia de calidad de la leña, el plan establece la creación de una ordenanza municipal para regular y fiscalizar este combustible, la creación de programas de fomento a comerciantes y productores de leña para promover su formalización, un registro obligatorio de comerciantes de leña y la creación de un Acuerdo de Producción Limpia (APL) con estos, entre otros.
En cuanto a calderas y otras fuentes fijas emisoras, se establece un límite máximo de emisión de material particulado de 50mg/Nm3 para calderas nuevas con una potencia de entre 75 kW y 1MWt, y de 30 mg/Nm3 para calderas con una potencia igual o superior a 1MWt. Además, se establecen límites máximos de emisión de SO2, la exigencia de sistemas de monitoreo continuo de MP y SO2, un programa piloto de recambio de calderas en organismos públicos, y un APL con las panaderías.
Respecto del Transporte, se establece un programa de renovación de buses mediante un recambio de al menos 80 máquinas del transporte público en 5 años, así como medidas de ordenamiento de transporte público, entre otras.
Finalmente, el Plan de Descontaminación de Valdivia establece una Gestión de Episodios Críticos para el período de mayor contaminación, entre el 1 de abril y el 30 de septiembre. En caso de alerta, se prohibirá el uso de más de un calefactor por vivienda, mientras que para preemergencia y emergencia se prohibirá el uso de calefactores y cocinas a leña entre las 18 horas y las 6:00 horas del día siguiente, a excepción de los calefactores del Programa de Recambio del Ministerio del Medio Ambiente, entre otras medidas.
