En la actualidad existen tecnologías, dispositivos o aditivos que aseveran entregar alguna mejora en el rendimiento de un vehículo, producto de su uso. Sin embargo, en Chile no existía ninguna metodología que permitiera validar la veracidad de esta información.
Para surge la norma chilena (NCh 3331) que establece un protocolo para medir el impacto en el consumo energético de un vehículo producto del uso de tecnologías eficientes.
Para ver el video que explica los alcances de la NCh 3331, siga el siguiente enlace.