CodexVerde: En la línea de promover la salud de las personas y respetar los preceptos constitucionales en este ámbito, un grupo de diputados del oficialismo e independientes, liderados por Jenny Álvarez, presentó un proyecto que modifica la Ley de Tránsito, con el objeto de prohibir y sancionar el uso de tronadores en vehículos motorizados.
Los legisladores dan cuenta de la preocupación que ha tenido el legislador por desarrollar a nivel legal y reglamentario la garantía constitucional del artículo 19, N° 8, que consagra que toda persona tiene el «derecho a vivir en un medio ambiente libre de contaminación» y que es «deber del Estado velar para que este derecho no sea afectado». Asimismo, reconocen la jurisprudencia que se ha desarrollado en los Tribunales Superiores de Justicia, originada en una serie de recursos de protección que han invocado como norma infringida el citado precepto constitucional.
Sin embargo, observaron, las diversas sentencias tienen en común las fuentes fijas de producción de emisiones acústicas, no advirtiéndose pronunciamientos relativos a fuentes móviles.
«Lo anterior puede encontrar explicación en las características propias de las fuentes móviles, que dificultarían su individualización y la determinación del momento en que éstas afectarían al eventual recurrente de protección. Por lo anterior, resulta primordial que el ordenamiento jurídico prohíba aquellas fuentes de emisiones acústicas que puedan constituir una afectación a la garantía constitucional, para así evitar una actuación una vez que se haya ocasionado el daño, sin perjuicio de establecer sanciones contra quienes sean responsables de generar que estas fuentes de emisión acústica generen el resultado lesivo», plantearon.
Estimaron posible constatar que algunos automovilistas alteran el tubo de escape de sus vehículos con el propósito de amplificar o aumentar el ruido que los motores generan a través de artefactos que se adquieren en el comercio asociado al rubro automotor y que son conocidos con el nombre de «tronadores».
Específicamente, la norma propuesta prohíbe modificar el tubo de escape de los vehículos mediante el uso de tronadores o cualquier otro artefacto análogo que amplifique o altere el nivel de emisión acústica que esté permitido.
