Durante su gira por la capital solar de Chile, Atacama, el ministro de Energía, Andrés Rebolledo, visitó tres proyectos que aprovechan el sol para mejorar las condiciones laborales, productivas y la calidad de vida de las personas.
Rebolledo destacó que «Atacama tiene un sello y ese sello es el sol, un combustible inagotable y que ha aportado significativamente a que hoy Chile cuente con un 12% de energía renovable en su matriz. Esta región se ha ido transformando en un polo de desarrollo energético renovable, hoy un 45% de su capacidad instalada corresponde a ERNC”.
Caleta Barranquilla
Caleta Barranquilla e una zona de tradición pesquera y que aún no cuenta con energía eléctrica. Es una zona aislada que hoy, gracias a la energía solar, puede operar una cámara de refrigeración móvil que funciona con energía limpia y que permite sus pescadores mantener en buen estado los productos que extraen del mar.
Luis Castro, presidente del sindicato N°2 de pescadores de la Caleta de Barranquilla, expresó: “Necesitábamos una cámara para poder conservar los productos que extraemos del mar, porque los intermediarios se aprovechaban de esta situación y nos bajaban el precio. Gracias a la energía solar, hoy podemos vender a buen precio y de esa forma optimizar nuestras condiciones laborales, y arreglar el bolsillo de los trabajadores de la caleta Barranquilla, que también ayuda a mejorar nuestra calidad de vida”.
La inversión de $33.009.179 fue realizada por el Ministerio de Energía.
El primer Parque Nacional de Chile con energía solar
El Parque Nacional Pan de Azúcar es la primera reserva natural en Chile que cuenta con una planta solar fotovoltaica. El proyecto que tiene 38kWp de potencia instalada, fue financiado por el programa Mejoramiento de Barrio de la Subdere, Municipalidad de Chañaral, y la inversión alcanzó los $198 millones.
Esta primera cooperativa eléctrica solar de Atacama, beneficiará con energía limpia y las 24 horas del día, a las 22 familias que viven dentro del Parque Nacional y a los trabajadores de Conaf. Todos ellos, antes dependían del uso de un generador diésel, el que les permitía tener solo un par de horas de electricidad al día, además de ser altamente contaminante.
El aeródromo solar
El aeródromo Desierto de Atacama, de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), hoy genera con energía fotovoltaica el 30% de la energía necesaria para su funcionamiento.
El Programa Techos Solares Públicos, del Ministerio de Energía, busca contribuir a la maduración del mercado fotovoltaico para autoconsumo, mediante la implementación de estos sistemas en los techos de los edificios públicos. El proyecto del aeródromo Desierto de Atacama tuvo una inversión de $67,5 millones, generará 76.321 kWh de energía eléctrica al año y reducirá un total anual de 61 toneladas de CO2 equivalente.
Esta planta fotovoltaica entregará un ahorro a la DGAC que alcanza los $3.820.000 al año.
