En Chile, la conversación sobre la descarbonización del transporte se centra en la integración de vehículos eléctricos a las flotas de buses y camiones. Si bien ese es un paso crucial, para que podamos ver sus efectos en las emisiones de CO2, faltan varios años. Por eso debemos desarrollar una estrategia paralela que nos permita reducir en el corto plazo el 11% de las emisiones totales de nuestro país que provienen del transporte a combustión.

En concreto, hoy nuestro foco de corto plazo debería estar en incrementar la eficiencia operativa de la flota de vehículos de trabajo de nuestro país, la que aún es movida, principalmente, por combustibles fósiles.
A modo de ejemplo, en gran parte de las operaciones de transporte se podrían lograr importantes ahorros de combustible y por tanto de emisiones de CO2, si mandantes y transportistas trabajaran en conjunto para reducir los tiempos de espera excesivos que sufren en su mayoría los vehículos de carga, en origen y destino. Recordemos que todos esos “tiempos muertos” también impactan en la calidad de vida de los conductores, al tiempo que presionan al alza el riesgo de accidente, principalmente por exceso de velocidad, otra causal importante de la cantidad de emisiones que tiene el transporte en Chile hoy.
La buena noticia es que el desafío de optimización es abordable y fácil de implementar con herramientas de análisis que permiten identificar dónde están las pérdidas de eficiencia explicables por procesos, etapas o subetapas de los mismos. Así rápidamente se puede buscar soluciones a problemas que afectan los tiempos de espera para carga o descarga, pesaje o tara, acceso a zonas, chequeos de seguridad y/o control documental, entre las muchas otras áreas o procesos donde hoy detectamos significativas pérdidas de eficiencia.
En resumen, la productividad es el atajo que nos permitirá lograr reducciones significativas de CO2 en el transporte ahora mismo, mientras ahorramos dinero, mejoramos la competitividad y la calidad de vida de los conductores, estaremos también disminuyendo de manera significativa las emisiones del transporte de nuestro país.