Cerca de las 10 horas de ayer se reunió la recién conformada mesa de trabajo público privada que tiene como misión analizar el impacto de las heladas en el sector agrícola y evaluar medidas en beneficio de los productores y trabajadores afectados. La instancia reúne a los ministerios de Agricultura, del Trabajo, Corfo, BancoEstado, la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) y la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (Abif).
Al término de la reunión, el ministro de Agricultura, Luis Mayol, explicó que la mesa evaluará las ayudas caso a caso en función del daño y situación de los productores y que un balance más detallado se tendrá en un plazo de entre 15 y 20 días más.
En materia de financiamiento y deudas, el presidente de la Abif, Jorge Awad, afirmó que “la banca tiene la mejor disposición para apoyar a todos los agricultores que en el sector frutícola sean viables”. Explicó que “se debe tener toda la información de lo que realmente les está pasando a los agricultores para que sean sujetos de reprogramación o de apoyo de la banca”.
A lo largo del país, los créditos para fruticultura se concentran en la Región Metropolitana, con 53,8% del total de los US$ 2.099 millones de la industria. Sigue la VII Región, con 15,2% del total, y la VI, con 14,4%, informó la Abif.
El vicepresidente de Banco Estado, Roberto Palumbo, sostuvo que existen diversos mecanismos para ir en ayuda de los agricultores, como reprogramaciones, períodos de gracia, ampliación de capitales de trabajo.
Propuesta de la SNA
Horas más tarde, la Sociedad Nacional de Agricultura, junto a Fedefruta y la Confederación Nacional Campesina entregaron detalles respecto del impacto en los cultivos. Las especies afectadas representan el 61% del total de la superficie de frutales, siendo la Región de O’Higgins la que presenta el mayor impacto, señalaron.
En el caso de la uva vinífera, el daño se registra en plantaciones desde Coquimbo al Maule, afectando a las variedades tempranas, como Chardonnay y Pinot Noir que se cultivan en los valles costeros de la zona central.
El presidente de Fedefruta, Cristián Allendes, reiteró que las pérdidas bordean los US$ 1.000 millones.
Preliminarmente, el impacto estimado en el empleo temporal sería sobre 100.000 a 150.000 trabajadores en los próximos seis meses, dijo Fedefruta. Respecto de este punto, el presidente de la SNA, Patricio Crespo, planteó que el sector no contó con la información adecuada respecto de la magnitud de las heladas .
En la ocasión, la SNA propuso una serie de medidas para hacer frente al fenómeno: programas de financiamiento puente para el problema de la liquidez, ampliar cobertura de financiamiento para la recuperación productiva, subsidio a la contratación de mano de obra, programas de oficios para trabajadores desempleados, líneas de financiamiento para equipos de control de daños (como aspersores), ampliar la oferta de seguros climáticos, mejorar su diseño, difundir políticas de prevención del riego climático y mejorar y extender la red de monitoreo climatológico.
El próximo lunes, la instancia volverá a reunirse, esta vez en la SNA.
Precio y distribución
Entre 45 y 60 días podrían demorar en notarse los efectos de las heladas en el precio de la fruta, señalaron en algunos de los principales centros de distribución de la Región Metropolitana.
En la Central de Abastecimiento Lo Valledor -que abastece de frutas principalmente a las ferias libres y la zona sur de Santiago- indicaron que la entrada de camiones ha sido normal, y no hay evidencia de variación de precios. “Diariamente entran unos 100 a 120 camiones con fruta, y eso ha continuado”, dijo el coordinador de patio de Lo Valledor, Germán Faúndez. Agregó que hay antecedentes que el daño producido por la helada es grande, pero que sólo en noviembre -por la estacionalidad de la fruta- se podría cuantificar el impacto en precios que tendrá.
El vocero de la Vega Central -que abastece a la mayor parte de los restaurantes de la Región Metropolitana-, Arturo Guerrero, indicó que el flujo de camiones -unos 200 diarios que llegan hasta el lugar- no ha variado y que los precios se han mantenido estables, excepto por variaciones al alza en papas y cebollas. “Probablemente veremos algún efecto en los precios de la fruta en 45 o 60 días”, dijo.
Fuente: La Tercera
