La creación de dos extensas áreas que permitirán ampliar la protección ambiental de la Antártica es el tema central que abordarán los participantes en la reunión anual de la Comisión para la Conservación de los Recursos Vivos Marinos Antárticos (Ccamlr), que comenzó en la ciudad australiana de Hobart.
Alrededor de 300 científicos y delegados de los 24 países miembros y la Unión Europea (UE) que conforman el organismo internacional participan en la cita, que se extenderá hasta el próximo 1 de noviembre.
Las propuestas analizadas apuntan a establecer reservas que abarcan tres millones de kilómetros cuadrados en el continente helado.
Control de actividad pesquera
Australia, Francia y la Unión Europea presentan una propuesta conjunta que contempla la creación de un sistema de siete zonas protegidas con una superficie marina total de 1,6 millones de kilómetros cuadrados en el este antártico, con el fin de preservar los recursos naturales y controlar la actividad pesquera en la zona.
La iniciativa pretende dejar fuera de explotación a espacios que son vulnerables o que juegan un papel ecológico importante en el desarrollo de especies como el krill, la merluza, pingüinos y mamíferos, precisó el director de la División Australiana Antártica, Tony Fleming.
Estados Unidos y Nueva Zelanda proponen, a la vez, la creación de un área marina protegida de 1,25 millones de kilómetros cuadrados para salvaguardar la región del Mar de Ross.
Ambas iniciativas fueron discutidas en dos ocasiones anteriores, el año pasado en Hobart y en julio de este año en Alemania, sin que hasta la fecha se haya logrado el consenso de todas las partes necesario para la aprobación.
«Es muy difícil presentar una propuesta y que la acepten todos los miembros sin que las restantes delegaciones añadan sus valoraciones», declaró el presidente del comité científico de la CCAMLR, Christopher Jones.
Australia, Francia, la UE, Nueva Zelanda y EE.UU. emitieron la semana pasada un comunicado conjunto llamando a la aprobación de ambas proposiciones.
Fuente: Emol
