Una innovadora iniciativa lanzó la granja educativa isla Huape Chico -ubicada en el río Cruces, en Valdivia-, que busca atraer a más turistas, fomentando la observación de aves en un lugar privilegiado: el Santuario de la Naturaleza Carlos Andwanter.
“Hay muchas aves nocturnas, además de lechuzas de diverso tipo; también se ven zorros, coipos y otros animalitos que cuando se esconde el sol salen a cazar”, explica Sonia Navarro, dueña de la granja y de toda la isla de siete hectáreas y media donde está emplazada. “Es una forma de agregarle un plus a lo que ofrecemos. La gente paga sólo por el cruce hasta la isla, yo misma los voy a buscar en mi lancha y se quedan todo en día en la isla”, agrega Navarro.
Desde Punucapa, a 14 km de Valdivia, sólo toma 10 minutos llegar en lancha hasta esta isla, previo aviso a los anfitriones. Ahí viven hace años, ella dedicada a la crianza de aves y él como cuidador del santuario desde su creación, a principios de los 80. Aprovechando la experiencia de ambos, emprendieron con esta granja, en la que crían más de un centenar de aves comunes y exóticas, como pavos reales y gansos africanos, y animales de corral que los niños pueden alimentar.
Oferta en la zona
Sumar el turismo nocturno es una iniciativa apoyada por el proyecto Los Ríos Ecoturístico de la U. Austral, que trabaja con siete emprendimientos de gran potencial, enfatizando la sustentabilidad y la energía renovable.
“Con energía solar se cargan las baterías que alimentarán unos focos en torno a la isla para ver así el recambio de especies al amanecer y al anochecer. En una segunda etapa se comprarán binoculares de visión nocturna”, explica Héctor Pavés, director del proyecto. Con los primeros paneles aportados por Indap se iluminaron los baños públicos de la isla y la casa de los dueños, y pronto se usarán para una incubadora de aves.
En el intertanto, los visitantes recorren el sendero entre especies nativas o toman un tour guiado en lancha. En el trayecto se pueden ver especies como cisnes de cuello negro, garzas, patos silvestres y águilas pescadoras, entre las tantas especies que habitan en las 5.000 ha del santuario.
El sector forma parte del destino Valdivia-Corral, uno de los tres polos donde se focaliza la promoción turística en Los Ríos. “Sumar turismo nocturno es parte del fortalecimiento de la oferta en la isla, que se complementa muy bien con la de Punucapa, famosa por sus fábricas de sidra y cerveza artesanal, con restaurantes y cabañas, que no tiene la isla por ahora”, dijo Paulina Steffen, directora regional de Sernatur.
En tanto, los lancheros están empeñados en revitalizar las visitas al santuario, lo que implicaría un mayor flujo por el río hasta Punucapa y la isla Huape. “Este verano tuvimos un 10% más de turistas, lo que nos tiene muy motivados para relevar este atractivo”, indicó Fernando Liewald, presidente de la Agrupación de Turismo Fluvial de Valdivia.
Fuente: La Tercera
