Factores climáticos como falta de precipitaciones, altas temperaturas y una megasequía que cumple 10 años, son algunos de los elementos que se han conjugado para desatar una ola de calor en la zona central de Chile. Si bien en noviembre los termómetros comienzan a subir, durante 2019 lo han hecho de manera súbita. El martes y miércoles, la Dirección Meteorólogica de Chile (DMC) anunció 34°C. El jueves bajará, pero poco. El pronóstico es de 31°C. El fenómeno se repite en diferentes ciudades a lo largo de Chile.
Arnaldo Zúñiga, meteorólogo de la DMC, señala que será muy difícil remontar el 73% de déficit de agua caída desde Ñuble al norte, menos aún con este evento de temperaturas extremas en la zona central del país. “En Santiago, durante noviembre, en los últimos diez años se estaba registrando un evento de temperatura sobre los 33°C, este noviembre de 2019, considerando los últimos días, sumaríamos más de cinco jornadas con esas temperaturas. Incluso mañana miércoles puede ser el séptimo día con más de 33 grados“.
Revisando el detalle, en la estación Quinta Normal de la DMC, desde el 6 noviembre se han producido cinco eventos sobre los 33°C en el centro de la capital: el 7 noviembre se registraron 33,7°C, el 9 noviembre 34,9 °C, el día 10, 33,1 °C, el 15 de noviembre 33,7°C y el lunes 18 noviembre 34,7 °C.
María Soledad Valdebenito, meteoróloga de la Universidad de Valparaíso, explica que en Chile se denomina evento de ola de calor cuando “la temperatura máxima es igual o mayor al percentil 90 por tres días consecutivos o más, en el período comprendido entre noviembre y marzo del año siguiente. Son temperaturas anormalmente altas para una estación del año y determinada área geográfica que se mantiene durante varios días o semanas”.
Es considerado el noviembre más caluroso de los últimos diez años, tomando como antecedente las temperaturas máximas, dice Zuñiga. “Los 34,9°C del día 9 de noviembre, es el récord histórico de temperatura máxima para este mes según nuestros registros”, asegura.
La meteoróloga Yael Szewkis coincide. “Hemos tenido temperaturas muy altas en noviembre, incluso rompimos el récord de temperatura máxima. Estos últimos días no han quedado ajenos. Sin embargo, a partir del jueves disminuyen, pero de todos modos tendremos días cálidos”.
En la Quinta Región, la Estación Rodelillo ya registra dos eventos sobre los 30°C en Valaparaíso. El 14 de noviembre el termómetro registró 30,4°C y cuatro días después subió a 31,7°C. En Rancagua, hoy y mañana los termómetros marcarán 33°C y el jueves 31°C. En Talca, hoy 32°C y mañana miércoles 31°C. Mientras que en Chillán, hoy se registrarán 32°. Esto ratifica las altas temperaturas desde Valparaíso a Chillán.
“La ola de calor que afecta a la zona central de Chile durante esta semana se caracteriza por una masa de aire seca asociada al anticiclón subtropical del Pacífico Sur, el cual es un sistema meteorológico que está posicionado casi de forma permanente frente a las costas de Chile a nivel de superficie. Esto genera ocurrencia de buen tiempo, escasa nubosidad costera y mayor estabilidad atmosférica lo que induce a mayores temperaturas en superficie, cielos despejados, mayor calentamiento y mayor sequedad ambiental”, establece Valdebenito.
Además, a la fecha durante noviembre no hay registros de precipitaciones en la Región Metropolitana. Misma situación en Valparaíso y gran parte de la zona norte y centro de Chile. El pronóstico no es favorable para los próximos meses de verano (diciembre, enero y febrero). Se mantendrán las altas temperaturas y escasos eventos en los que se produzcan precipitaciones.
“Estamos con un régimen anticiclónico cálido en el centro del país, por lo que el aire desciende desde niveles medios y altos en la atmósfera, lo que comprime y calienta el aire. Por eso ocurren las altas temperaturas”, añade Szewkis.
Megasequía y escasez hídrica
Las altas temperaturas y la falta de precipitaciones han provocado que Chile sea testigo de una megasequía. Lagos y lagunas absolutamente secos, flora y fauna en peligro, son algunos de los elementos que lo ratifican. En otros países, como ocurrió en Sudáfrica, la situación llegó a mayores. Estuvieron muy cerca de decretar el denominado “Día Cero”, en el que se iban a quedar sin una gota de agua. Finalmente no sucedió.
En el país, esto no es nuevo. Ocurrió en 1924, en 1968, 1988 y en 1998. En todas esas ocasiones, el déficit superó el 60%. El año 2019 entra en esta estadística como uno de los cinco años más secos del siglo. A diferencia de sequías anteriores, la que vivimos actualmente es poco habitual debido a su extensión. Diez años supera lo normal para un evento de estas características.
Uno de los motivos es el calentamiento que se produce al otro lado del Pacífico, cera de Nueva Zelanda. Se registra una superposición sumado a la acción del hombre, que ayuda a incrementar esta condición.
Otro elemento, revelado recientemente en un estudio liderado por Raúl Cordero, académico de la Universidad de Santiago, es que la cordillera de los Andes también sufre con altas temperaturas y el calentamiento global. Ha perdido el 20% de su nieve entre Putre y Osorno. A nivel general, en la zona central el déficit de nieve es de 75%.
“Esta variable debe ser incorporada en el desarrollo de actividades y proyectos minimizando, por un lado la generación de gases efecto invernadero, y a su vez considerar medidas que permitirán adaptarnos al cambio climático. De lo contrario se verán los efectos en la salud y bienestar de la población, productos de estas olas de calor que serán cada vez y graves”, agrega Greene.
Pese a las altas temperaturas, la ubicación en todo el país junto al océano Pacífico ayuda a regular la temperatura. A diferencia de otros países, donde en épocas de calor, los termómetros marcan más de 40°C.
Incendios forestales
A la actual ola de calor que afecta a la zona centro-sur de Chile, se suman nuevos focos de altas temperaturas como los incendios.
Actualmente el centro de incendios se encuentra en la Región de Valparaíso, con ocho focos activos y casi 5.000 hectáreas consumidas. Desde julio a la fecha, se han registrado 1.000 incendios en Chile, con un aumento de un 104% con respecto al período anterior.
Biobío lidera la estadística con 217 siniestros, la Araucanía sigue con 184, luego Valparaíso con 177, la Región Metropolitana 148, Maule 102 y O´Higgins 84.
“La tendencia será de un aumento progresivo de los eventos asociados a olas de calor, por lo que no nos debería extrañar que estos eventos sean cada vez más frecuentes. Por ello debemos tomas medidas urgentes de mitigación y adaptación al cambio climático”, señala Jorge Greene, ingeniero en ejecución medioambiental y jefe de la carrera de Medio Ambiente del IMDA (Instituto del Medio Ambiente).
